mjs al alma

La ansiedad – Dalai Lama

-Bueno -le dije-, en lugar de un temor intenso o concentrado en un individuo o situación específica, muchos de nosotros nos senti­mos agobiados por una preocupación más difusa acerca de una am­plia variedad de problemas cotidianos. ¿Tiene alguna sugerencia acer­ca de cómo tratar eso?

El Dalai Lama asintió con la cabeza, antes de responder.

-Uno de los métodos que personalmente me parecen útiles para reducir esa clase de preocupación consiste en cultivar el siguiente pen­samiento: si la situación o problema puede remediarse, no hay nece­sidad de preocuparse. En otras palabras, si existe una solución o una forma de salir de la dificultad, no habría necesidad de sentirse abru­mado por ella. La acción apropiada, por tanto, es la de buscar su solu­ción. Es más sensato dedicar la energía a concentrarse en la solución que preocuparse por el problema. Por otro lado, si no hay forma de encontrar una solución, si no hay posibilidad de resolverla, tampoco sirve de nada preocuparnos por ella, puesto que, de todos modos, tampoco podemos hacer nada. En tal caso, cuanto antes se acepte ese hecho, tanto más fáciles serán las cosas. Esta fórmula, claro está, su­pone abordar directamente el problema. De otro modo, no podre­mos descubrir si hay una solución o no.

 

-¿Y si el pensar así no contribuye a aliviar la ansiedad?

-Bueno, entonces quizá haya necesidad de reflexionar un poco más sobre estos pensamientos y reforzar estas ideas, para recordarlas. En cualquier caso, creo que este enfoque puede ayudar a reducir la an­siedad y la preocupación, lo que no significa que vaya a funcionar siem­pre. Si uno se enfrenta con una ansiedad, creo que hay que considerar la situación específica que plantea. Hay diferentes tipos de ansiedad y diferentes causas. Algunos tipos de ansiedad o de nerviosismo podrían tener causas biológicas; a algunas personas, por ejemplo, les sudan las palmas de las manos, lo que, según el sistema médico tibetano, indicaría la existencia de un desequilibrio en los niveles de la energía su­til. Algunos tipos de ansiedad pueden tener raíces biológicas, lo mis­mo que algunos tipos de depresión, para los que quizá sea útil el tratamiento médico. Así que, para afrontar la ansiedad con eficacia, hay que ver de qué clase es y cual es su causa.

Lo mismo que sucede con, el temor, puede haber diferentes tipos de ansiedad. Uno de ellos, que me parece común, sería el temor al ri­dículo, o el temor a que los demás piensen mal de uno…

(…)

¿Cómo afronta personalmente esta clase de ansiedad? -le pre­gunté.

Me contestó con serenidad, con un tono quejumbroso y nada afectado en su voz.

-No lo sé… -Hizo una pausa y permanecimos en silencio du­rante largo rato, mientras él parecía reflexionar cuidadosamente. Fi­nalmente, dijo-: Creo que la honradez y una motivación adecuada son las claves para superar esa clase de temor y ansiedad. Si me sien­to ansioso antes de dar una charla, procuro recordar cuál es la razón principal de ella y me digo que el objetivo de la conferencia es benefi­ciar al menos a algunas personas, no demostrar mis conocimientos.

(…)

Así que, una y otra vez, creo que la motivación adecuada es una especie de protectora contra estos sentimientos de temor y ansiedad. Por eso es tan importante la motivación. De hecho, todas las accio­nes humanas pueden verse en términos de movimiento y lo que se mueve por detrás de todas las acciones es lo que las impulsa. Si se de­sarrolla una motivación pura y sincera, si se está motivado por el de­seo de ayudar, sobre la base de la amabilidad, la compasión y el res­peto, se puede desarrollar cualquier trabajo en cualquier ámbito y funcionar con mayor efectividad, con menor miedo o preocupación, sin temor a lo que digan los demás o si al final se tiene éxito y se pue­de alcanzar el objetivo. Aunque no logres alcanzar tu objetivo, pue­des sentirte bien con el simple hecho de haber realizado el esfuerzo.

Pero si tienes una mala motivación, aunque la gente te alabe o alcan­ces los objetivos que te habías propuesto, no te sentirás feliz.

 

Fragmentos del libro “el arte de la felicidad” Cutler con el Dalai Lama

 

1 comentario en “La ansiedad – Dalai Lama”

  1. NAMASTE…me encanto tu "templo de la sabiduria"…si me permites llamarlo asi…todo ese mundo de las energiasy del guia espirutual me fascina…poco a poco estoy entrando en el…y cada dia que pasa..me abre mas los ojos sobrela vida…y d como yo quiero que sea la mia…asi que solo….GRACIAS…..

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s